VIVERO DE ACCC GRANADA EN PINOS GENIL

Para una Asociación sin animo de lucro dedicada a la reforestación y sin apenas medios económicos un vivero es imprescindible y no solo para reproducir las plantas a partir de semillas y esquejes y así no tener que comprarlas, sino también para que aquellas personas que lo deseen puedan participar en la gratificante tarea  de dar «vida»  y ver crecer a las plantas que después vamos a sembrar en el campo. 
Por eso, mi agradecimiento al Alcalde de Pinos Genil, Gabriel Gómez es enorme. De forma desinteresada nos ha cedido un pequeño terreno de su propiedad junto al río Genil, que si bien es un poco umbrío y frío durante el invierno, cuando llega la primavera es un lugar ideal para trabajar con las plantas mientras escuchas el murmullo del río y los cantos de los pájaros que habitan en su bosque de rivera y en los frutales del vivero (cerezos, nogales, granados)
Pero para formar este pequeño vivero en el que ahora hay más de 1200 plantas ha sido necesario dar muchos pasos previos.
El primero y más importante, recoger las semillas de los árboles y arbustos de los alrededores de Granada. En junio, septiembre, noviembre y diciembre se recogieron semillas de quince especies diferentes, entre ellas gayomba,  jazmín silvestre, aladierno, retama, lentisco, madroño, espino albar, zarzaparrilla, torvisco, enebro de miera, ………….. y por supuesto unas tres mil bellotas de encina. 
Después, organizar los improvisados semilleros en el jardín que rodea mi piso. Salvo las bellotas y madroños, el resto de las semillas fueron sembradas en semilleros (diversos recipientes de leche y detergente partidos por la mitad y rellenos de mantillo) en otoño. Las bellotas se recogieron a primeros de diciembre y se pusieron a germinar en agua a finales de diciembre en una habitación de mi casa. En febrero las muchas bellotas que aún quedaban  se trasladaron al vivero donde continuaron germinando mezcladas con tierra y fueron sembradas en los alvéolos.
La mayoría de las semillas necesitan algún tratamiento previo antes de sembrarlas en los semilleros, como separarlas de las vainas que las envuelven o de los frutos carnosos en las que están incluidas, o dejarlas durante un par de meses en el frigorífico.
El tercer paso fue organizar un sitio donde trabajar sin llenarse de barro y contar con una mesa o plataforma. Hubo que comprar una malla para ponerla en el suelo y también unos caballetes para formar una mesa con un tablero reciclado. Se compró barniz y todas las estructuras se barnizaron para protegerlas de la humedad y que no se estropearan . 
El vivero ya estaba listo y un día de febrero cogí un semillero de gayombas ya nacidas y me las llevé para sembrarlas en las bandejas de alvéolos reciclados de la primera siembra. Imposible sembrarlas, todo estaba helado, el suelo, el mantillo, el agua de los recipientes, ….. Cuando el sol calentó el mantillo, sembré algunas plantitas en una bandeja de alvéolos pero no las pude dejar en el vivero, así que regresé de nuevo con mi semillero  y unas bandejas de alvéolos a mi casa.
Ese día me di cuenta de que no se puede utilizar el vivero durante el invierno a no ser que se construya un invernadero. Obviamente eso cuesta bastante dinero.
Pasados los fríos comencé a sembrar y dejar las plantas en el vivero, eso sí protegidas por una manta térmica, un fina lámina textil que protege de las heladas los cultivos.
El mantillo de la marca Compo es el mejor del mercado, pero es bastante caro, así que decidí mezclarlo con tierra  del terreno y posos de café. ¿Por qué?
Asociados a las raíces de casi todas las plantas se encuentran unos hongos llamados genéricamente micorrizas que viven en el suelo y les facilitan la absorción de agua y nutrientes.  Cada suelo tiene unos hongos diferentes y cuando se siembran encinas se aconseja que cuando la bellota germina, lo haga en un suelo que contenga unas micorrizas similares a las que luego van a existir en el lugar donde va a ser trasplantada. Seguramente las micorrizas del terreno del vivero serán muy parecidas a las de los terrenos próximos a Pinos y a Granada. Al menos, eso espero.
Los posos del café son un excelente abono y es una buena forma de reciclarlos y no tirarlos a la basura.
En el vivero no solo pasamos a los alvéolos las plantitas de los semilleros sino que también reproducimos algunos arbustos como el madroño, espino albar, aladierno o el enebro mediante esquejes. Para que los esquejes arraiguen con facilidad utilizamos hormona de enraizamiento.
Así que además del mantillo hemos comprado hormonas de enraizamiento, bandejas de alvéolos, guantes, etc.
El trabajo del vivero no acaba cuando siembras lasemillas y trasplantas las plantitas a los alvéolos, o cuando siembras los esquejes, después hay que regarlos y quitarles las malas hierbas que van naciendo o los caracoles o babosas que intentan alimentarse de los pequeños brotes. En fin, un bonito trabajo.
Además de tiempo y trabajo, mantener el vivero necesita dinero, por eso desde aquí os pido vuestra colaboración.
En esta sección irán apareciendo información, fotos y vídeos de nuestro vivero.