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Siembra de arbustos y bellotas pregerminadas en una zona del parque periurbano quemada en 2017.

El domingo 13 de enero de 2019 unos 25 voluntarios de ACCCgranada plantaron 162 arbustos autóctonos de tres especies: gayomba, lentisco y aladierno. También sembraron unas 200 bellotas de encina pregerminadas.
Se sembraron en una zona indicada por la Consejería de Medio Ambiente (el Parque Periurbano quemado en 2017, por detrás del cementerio musulmán) quien suministró las herramientas para la siembra, pero no las plantas, que fueron compradas en el Vivero de Zuaime, en Baza, por Lola. Algunos voluntarios contribuyeron en su compra.
Desde esta asociación se pretende repoblar imitando un poco a la naturaleza, es decir, se repueblan varias especies, cuatro en este caso, para conseguir una diversidad «similar» a la que hay en el bosque mediterráneo.
Se han escogido dos especies, los lentiscos y los aladiernos, que además de ser muy resistentes a la sequía y prosperar en suelos muy pobres y rocosos, producen frutos en forma de baya muy apetecibles para los pájaros. De este modo, proporcionamos a estas aves cobijo y alimento y ellas al comer los frutos dispersan de forma natural las semillas.
La gayomba es una planta leguminosa, que crece muy bien en todo tipo de suelos, y fija el nitrógeno del aire, enriqueciendo el suelo en sales nitrogenadas. Además, sus semillas germinan con gran facilidad y la planta se propaga con rapidez.
A pesar de lo duro y seco que estaba el terreno, los voluntarios han hecho unos hoyos donde han sembrado los arbustos y, junto a ellos, las bellotas. Cuando germinan las bellotas y nace una pequeña encina, ésta necesita algo de sombra que es proporcionada por el arbusto que crece junto a ella, que actúa así como una planta nodriza que le protege durante su desarrollo.
Las plantas se han regado con agua traída por los voluntarios. En una semana, si no hay lluvias, habrá que regar las plantas de nuevo para que no se sequen y las encinas puedan nacer.
En algunas zonas se han sembrado solo bellotas, ya que los arbustos se habían terminado. Como se ve en las fotos, las zonas de siembra se han marcado para ser reconocidas después por los voluntarios que las han plantado. Cada voluntario ha sembrado en una zona o parcela a la que «apadrina» regando y cuidando, al menos durante dos años, las plantas sembradas en ella.
Esta es la única manera de que las plantas sobrevivan a lo largo de los años, cada vez más calurosos y más secos por el Cambio Climático.
Las encinas y pinos carrascos sembrados en esta zona a comienzos del 2018 están todos secos y los sembrados en diciembre de 2018 lo estarán de no llover pronto.
Vídeo de la siembra tomado por María García por la tarde.

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